Durante 15 días entre el 28 de julio y el 15 de agosto 2014 se realizó el Taller Internacional de Obras con la participación de estudiantes de las tres principales escuelas de arquitectura de Suiza: la EFPL de Lausanne, la ETHZ de Zürich y la AAM-USI de Mendrisio.

Los 25 estudiantes suizos y los 12 estudiantes de nuestra Escuela fueron dirigidos por tres profesores de la EPFL: Patricia Guaita, Sony Devabhaktuni y Raffael Baur, y por los profesores de la PUCV David Luza y David Jolly.

El Taller desarrolló una estructura arquitectónica desde el acto poético realizado en el Taller de América contando con la participación de la mayor parte de los alumnos y profesores de la Escuela. La palabra poética estuvo también presente en varios momentos al cierre de las jornadas y al término de la obra, con la presencia de los poetas Carlos Covarrubias, Manuel Sanfuentes y Jaime Reyes.

Los estudiantes suizos se alojaron en unas cabañas ubicadas en la vecindad de los terrenos de la Ciudad  Abierta, lo que les permitió llegar a pie todos los días. Así, el ritmo de trabajo se constituyó en la forma de jornadas diarias solo con una interrupción para almorzar en la Sala de Música. Los almuerzos de lunes a sábado estuvieron organizados por seis grupos de estudiantes, quienes disponían el menú y lo servían.

En cuanto a las tareas de Taller, en el comienzo se centraron en la contemplación del lugar y las obras existentes por medio de la observación en la que se iniciaron los estudiantes suizos, dibujando del natural por primera vez para muchos. A partir de las observaciones del lugar y su levantamiento se determinó los posibles lugares de emplazamiento de la obra, optándose por el que ofrecía más ventajas para su inmediata instalación.

Se realizó el diseño y proyección de una estructura en madera a partir de una obra del arquitecto sueco Gunnard Asplund, la Capilla del Cementerio de Estocolmo, que fue traída a presencia por los profesores de la EFPL como un arquetipo de referencia. La estructura se proyectó a partir de unos prototipos estructurales que los estudiantes suizos habían realizado con anterioridad en Lausanne; se desarrollaron tres prototipos a escala natural, optando por aquel que ofrecía las mayores ventajas para su montaje en obra.

Luego, una parte de los estudiantes se dedicó en el Taller del Trabajo a realizar los elementos prefabricados de la estructura propuesta. Simultáneamente, otro equipo de estudiantes se dedicó al trazado y construcción de las fundaciones de la estructura proyectada. Ésta se realizó en base a polines de pino impregnado que se fundaron en la arena por medio de la perforación de ésta con un barreno especialmente diseñado con anterioridad para esta operación.

La estructura del arquetipo de Asplund es una cubierta que abarca del orden de los 18 metros de largo por 10 metros de ancho, que fue suspendida por unos pilares arriostrados sobre las fundaciones de pino impregnado, alcanzando una altura de unos 8 metros.

De modo general, la primera semana de trabajo fue destinada a la contemplación del lugar y a los actos que determinaron el tamaño de ocupación; la segunda, al diseño y fabricación de la estructura a levantar, y la última, al montaje de la obra en el lugar.

Este relato, sin alejarse tanto de la realidad, no la describe completamente. La experiencia de este taller es adquirir la destreza para erigir una estructura diseñada, en la que el diseñar y dibujar va acompañado simultáneamente de su realización, lo que implica la pronta corrección y re-diseño que permite erigir con los concretos medios con que se cuenta en ese momento, sean éstos de conocimientos, disponibilidad de materiales, mano de obra, energía y tiempo de realización.

El Taller se propuso, en su inicio, concebir una estructura que pudiera ser anticipada en su concepción por los estudiantes y profesores de Suiza antes de llegar a la Ciudad Abierta, para lo cual se convino en trabajar con madera y en una sola escuadría: pino insigne de 1×5”, que es normalmente fácil de obtener en la región, y abarcar una luz del orden de 10 metros.

El día 15 de agosto se dio término a la construcción de la estructura en madera, quedando trazado un tamaño arquitectónico que es la primera figura del Pórtico de los Huéspedes de la Ciudad Abierta.