Pasado más de un mes del incendio que afectó a Valparaíso el 12 de abril, la Escuela de Arquitectura y Diseño continúa ayudando a las familias damnificadas, a través de variadas iniciativas.

Los distintos talleres de Arquitectura y Diseño volcaron el quehacer del trimestre para enfocarlo en las necesidades que surgieron a partir de la tragedia. Así, desde cada disciplina, alumnos y profesores han estado trabajando en diferentes proyectos para contribuir a mejorar la situación que enfrentan los vecinos del cerro La Merced, donde la e[ad] concentró sus esfuerzos.

Cocina-comedor en Escuela Federico Albert

Luego del incendio, el Taller de 3º Diseño Industrial se hizo cargo de las necesidades alimenticias tanto de las familias damnificadas, como de los voluntarios que subían al cerro a ayudar.

Gracias al equipamiento que la Escuela de Arquitectura y Diseño posee para las travesías, el taller pudo montar una cocina en la Escuela Básica Federico Albert, que funciona como base de operaciones del cerro. Allí, los alumnos, a cargo del profesor Ricardo Lang, y del profesor ayudante Pedro Garretón, sirven más de 200 almuerzos diarios a quienes continúan reconstruyendo viviendas en el sector.

A través de una red de apoyo que contribuye abasteciendo de las materias primas para cocinar, ha sido posible mantener funcionando este servicio los siete días de la semana por más de un mes, y continuará hasta junio, cuando se cierra el primer período académico de los alumnos.

               

                

Reconstrucción de la memoria del Cerro La Merced

Considerando que el patrimonio intangible de un barrio puede ser un recurso que asegura el sentido de pertenencia ante un escenario devastador, el taller de 3º Diseño Gráfico, a cargo de la profesora Sylvia Arriagada, la profesora ayudante, Karen Carrera, y en conjunto con la psicóloga Carolina Naranjo, decidió trabajar en la reconstrucción de la memoria del cerro La Merced.

La propuesta es “hacer visible lo invisible”; reconstruir gráficamente la microhistoria de una comunidad urbana rica en actividades, lugares de encuentro, oficios, juegos y tradiciones compartidas, a través de instrumentos gráficos propios de la disciplina (mapas, íconos, infografías) que  pretenden recrear el paisaje como un modo oportuno de reconstrucción, y como legado al patrimonio intangible de la ciudad de Valparaíso.

La comunidad es parte fundamental del proyecto, razón por la que el taller se reúne una vez por semana con los vecinos del sector en la Escuela Básica Federico Albert. En estos encuentros, los habitantes del cerro comparten historias, experiencias y recuerdos del barrio a lo largo del tiempo, y en conjunto van validando la información que los alumnos registran a través de sus apuntes, fotografías y audio.

Durante el mes de abril, el Taller de 3º Diseño Gráfico postuló el proyecto “Hacer visible lo invisible”. Reconstrucción gráfica de la Memoria del cerro La Merced al fondo extraordinario Ideas y Manos para Valparaíso, que la PUCV creó especialmente para iniciativas en pos de ayudar a Valparaíso y sus damnificados. El proyecto fue seleccionado, y los recursos otorgados han permitido llevar a cabo las distintas actividades que han estado realizando.

                

                

Comedores para viviendas de emergencia

El taller de 2º Diseño Industrial, a cargo de los profesores Juan Carlos Jeldes y Daniela Salgado, ha estado trabajando con mobiliario de comedor, cocina y almacenaje para viviendas de emergencia.

El curso decidió hacerse  cargo de la construcción de 48 comedores, que surgieron a partir de 24 propuestas en grupo y 24 propuestas individuales. Los comedores están siendo financiados por gestiones que los mismos alumnos han llevado a cabo.

Considerando que cada vivienda corresponde a una familia con necesidades diferentes, los comedores no son seriados, sino que están pensados para cada caso particular. Algunos de ellos cuentan con mobiliario plegable, y cuidan aspectos de higiene y de guardado, ya que se cuenta con espacio limitado dentro de las viviendas.

El trabajo de construcción de los comedores tiene como plazo de término el 3 de junio, fecha en que concluyen las actividades del primer trimestre en la e[ad].

               

               

Sede comunitaria en Cerro La Merced

El taller de 3º Arquitectura, a cargo de los profesores Rodrigo Saavedra y Óscar Andrade, puso pausa a la materia de estudio iniciada este año -estaciones náuticas para un sistema de transporte marítimo en el Gran Valparaíso- y dio un giro para comenzar a pensar el espacio de la sede comunitaria de la Junta de Vecinos nº 60 del Cerro La Merced, ubicada en la calle Padre Febres.

El taller accede desde la observación de la realidad de Valparaíso, del estado que adquiere la ciudad frente al incendio: la emergencia. Desde una breve observación de la experiencia en las faenas en los lugares afectados, se concluye que el habitar en la emergencia se revela como algo unitario: un espacio, una puerta, un nivel, un plato.

Junto a esto, se observa la ciudad de Valparaíso con toda su complejidad. Durante estos días, una espesa niebla baña la ciudad desde la mañana hasta aproximadamente las 14:00 horas. Esta niebla que no es circunstancial, sino un hecho presente año a año que es propio de esta latitud y de esta costa, suprime la lejanía, dejando habitar solo lo próximo. La niebla con su cota numerable (300 m aprox.) define un límite de la ciudad, y se dan dos realidades al unísono; se habita lo doble.

A partir de esta observación, se construye una doble envolvente del espacio unitario de la emergencia, otorgándole la complejidad de lo doble, un espesor habitable con dos lados: lo próximo del interior de la sede y lo lejano de la extensión.

Por grupos, el taller propone segmentos de esta doble envolvente, enriqueciendo las posibilidades de habitar esta dimensión en parapetos que reciben al cuerpo (lo próximo) y proponen un modo siempre nuevo de relacionarse con la extensión (lo lejano); un hecho del habitar de Valparaíso regalado al espacio que surge en la emergencia desde la observación.

                     

                     

Construcción de Baño Seco en Cerro La Merced

El taller de Décima Etapa Arquitectura, Taller de Obra 2014, de la Escuela de Arquitectura y Diseño de la PUCV, en conjunto con la Agrupación Minga Valparaíso, liderada por los ex alumnos y arquitectos de la Escuela, Carolina Moraes y Cristóbal Hughes, realizan un trabajo colaborativo por iniciativa de los estudiantes del taller, para contribuir con el levantamiento de equipamiento sanitario para una vivienda familiar en el cerro La Merced.

El caso familiar que se propone es la “casa de la señora Filomena”, y corresponde a un predio que daba lugar en ese momento a tres mediaguas entregadas por el estado, tres viviendas dispuestas sin ningún orden, y que no cubrían las necesidades básicas sanitarias para este grupo familiar compuesto por seis personas: un adulto mayor, dos adultos y tres niños. Así, se toma la decisión en conjunto con “Minga” que lo urgente en este caso (y en otros más) es garantizar los servicios higiénicos para la familia, considerando importantes las condiciones sanitarias, sobre todo para niños y adultos mayores.

La iniciativa consiste concretamente en edificación de un baño seco, independiente de la red de alcantarillado en un momento en que aún las redes están reventadas como consecuencia del incendio. El baño seco, que posee tina, lavamanos y WC, es de una superficie de 4,5 m2 aprox., y está construido a base de una estructura de madera y elementos reciclados, como pallets, paja, botellas de vidrio, botellas de plástico, entre otros.

Se utiliza una técnica de construcción a base de revestimiento de adobe y sistemas pasivos de climatización llamada Earthship, que funciona como un invernadero que capta calor permitiendo el cultivo de plantas selectas que hacen de filtro y separador de las aguas grises del baño. A su vez, el baño queda conectado a la red de agua existente en el predio para dejar los artefactos funcionando.

Al mismo tiempo, la edificación se piensa desde la posibilidad de progresión, dando lugar a un espacio “temperie flexible”, que podría ser utilizado en el futuro para la instalación de un lavadero u otro equipamiento que la familia requiera.

De esta manera, el taller de obra, que había estado trabajando con moldajes flexibles de hormigón, adquiere una nueva técnica de construcción que será incluida en su proyecto de trimestre, quedando nos solo como experiencia, sino también como parte del desarrollo académico de los estudiantes.

                  

                  

Señalética de emergencia para el cerro La Merced

A partir de la iniciativa de la Escuela de acudir en ayuda de los damnificados, y de estar en contacto con la realidad de los vecinos, el taller de 2º Diseño Gráfico advirtió una necesidad.

Durante los primeros días, los vecinos, al abandonar momentáneamente las ruinas de sus casas, dejaban sus nombres, dirección o teléfono anotados con carbón en los muros, o en cartones amarrados a los postes y rejas.

A raíz de esto, el taller inicia un proyecto básico para producir un sistema de información vecinal, que actúa como un primer paso en la reconstrucción de la vida de barrio, fundamental para el largo proceso de recuperación.

El proyecto propone un sistema de señalética que indica, en primer lugar el nombre de las calles, y luego los nombres de las familias, generando un espacio el que los mismos vecinos pueden ir incorporando información. Esto constituye un aporte a la integración vecinal, ya que más que la mera función práctica de señalar las calles y su numeración, da pie a un acto radical de pertenencia, referido primeramente al domicilio individual, pero también a una unidad mayor, como lo es el barrio.

El sistema de información vecinal consiste en el diseño de paneles con información y señalización, instalados en la vía pública. Su función es proveer de un sistema de señalización de calles y facilitar la localización de direcciones dentro del barrio, basado en mapas de ubicación de sitios y listas de vecinos.

Los paneles están diseñados de tal manera que los vecinos puedan escribir directamente en ellos, completando los datos con los que los alumnos no cuentan. En esta etapa es fundamental la participación de los habitantes del sector, puesto que son ellos quienes conocen el lugar y tienen la información necesaria. Como consecuencia de esta actividad, el taller pretende recuperar para la comunidad una funcionalidad que mejora las comunicaciones y la interacción entre vecinos y el resto de los usuarios.

Este proyecto fue seleccionado por el fondo extraordinario Ideas y manos para Valparaíso, de la PUCV, recibiendo fondos para realizar las tareas correspondientes, y así llevar a cabo su ejecución.

Actualmente, el proyecto está en la etapa de estudio y diseño del sistema de señalética, que culmina este trimestre con la exposición de las propuestas individuales de los alumnos.

                   

                   

Exposición de obras de vanguardias artísticas

Los alumnos de 1º Diseño Plan Común, en el marco del taller de presentación, realizaron dos exposiciones de cuadros de vanguardias artísticas: futurismo, impresionismo, cubismo, fauvismo, constructivismo, surrealismo, dadaísmo y expresionismo. La exhibición se presenta como una forma de construir la celebración, lo que ha sido la materia de estudio del taller.

En un primer momento, se llevó color a la Plaza del Recuerdo del cerro La Merced, a través de una exposición de seis cuadros, que corresponden a las primeras seis vanguardias mencionadas anteriormente. En una segunda instancia, se construyó un cerco de un predio, en el que fueron montados fragmentos de obras de las mismas vanguardias, y que fueron expuestas durante el fin de semana.